El Ayuntamiento de Plasencia ha iniciado esta semana los trabajos previos al derribo del edificio que durante décadas albergó el bar Chiquete, situado en el acceso a la calle del Sol. La intervención ha comenzado con la retirada de los azulejos del histórico cartel de Osborne, que serán conservados debido a su especial protección patrimonial.
El derribo del inmueble, previsto para después del Martes Mayor, es un paso esencial dentro del plan municipal para liberar un importante tramo de la muralla histórica de la ciudad, comprendido entre el postigo de Santa María y la Puerta Talavera. Esta demolición permitirá no solo recuperar un tramo importante de la muralla oculto durante décadas, sino también generará un nuevo espacio de uso ciudadano através de la ampliación de los intinerarios peaotolnales generando más accesibilidad y seguridad.
En estos momentos, junto a la retirada del cartel, se están llevando a cabo otras tareas preparatorias como la delimitación de la zona, la desconexión de suministros e inspecciones técnicas para garantizar la seguridad durante las obras.
“Esta actuación no solo dignificará uno de los accesos más transitados al casco histórico, sino que también mejorará la movilidad urbana y la calidad de vida de los vecinos”, ha señalado el concejal de Planificación Urbana, José Antonio Hernández.