La consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, y el presidente de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), Rafael Benjumea, han firmado esta mañana un protocolo para el fomento de las energías renovables en Extremadura. UNEF es la principal patronal del sector fotovoltaico de nuestro país.
Olga García ha afirmado que “desde la Junta de Extremadura y UNEF consideramos al energético como un sector estratégico y tractor del empleo en la región porque lleva aparejado un evidente valor añadido en términos de especialización, innovación y desarrollo tecnológico”. Por ello ambas partes han considerado de máximo interés desarrollar un esfuerzo conjunto por hacer compatible el progreso y el desarrollo económico de la sociedad extremeña con el cambio de modelo energético.
En ese sentido, ha valorado la puesta en marcha por parte de UNEF del Certificado de Excelencia en Sostenibilidad y la Conservación de la Biodiversidad para reconocer aquellas plantas fotovoltaicas desarrolladas bajo los mejores criterios de calidad de integración social y ambiental. La consejera lo ha considerado “un instrumento útil para que el despliegue de las energías renovables en Extremadura sea compatible y respetuoso con un desarrollo armónico del territorio, la protección del medio ambiente y la biodiversidad en colaboración con los entes locales y agentes socioeconómicos afectados”.
Olga García ha recordado que “en Extremadura contamos con el Plan Extremeño Integrado de Energía y Clima con horizonte 2030, con el que buscamos la maximización de la generación de energía con tecnologías renovables, entre ellas la fotovoltaica y, en particular, el desarrollo de la generación distribuida y del autoconsumo”.
Para lograr ese objetivo, en la actualidad la región lidera el despliegue fotovoltaico en España con más de 4.000 MW instalados, contando además con 2.763 instalaciones de autoconsumo puestas en servicio con una potencia de 40 MW. Además, existen en tramitación 151 expedientes de proyectos fotovoltaicos para una potencia pico de 5.900 MW y se han recibido 2.900 solicitudes para las ayudas del Plan de Recuperación destinadas al autoconsumo.
La consejera ha insistido en “la necesidad de que las empresas promotoras de fotovoltaicas sean proactivas en el desarrollo rural del entorno donde se ubican y se favorezcan los beneficios asociados al territorio”.
A ello se une el hecho de que “en la regulación estatal, el otorgamiento de los puntos de evacuación para los nuevos desarrollos renovables se someterá a los denominados concursos de capacidad, en los que se aplicarán criterios para fomentar la generación de empleo, la participación de actores locales en los proyectos y la reinversión de los beneficios en la zona donde se ubicarán las instalaciones”.
Olga García ha finalizado su intervención expresando su deseo de que este Protocolo impulse un mayor desarrollo renovable solidario al máximo con nuestro territorio, generando grandes oportunidades para que la transición energética sea justa e inclusiva para todos los extremeños y extremeñas.
EJEMPLO PARA OTRAS REGIONES
El presidente de la Unión Española Fotovoltaica, Rafael Benjumea, ha explicado que el protocolo es un paso más en la estrecha colaboración que la UNEF viene desarrollando con Extremadura en los últimos años. En este sentido, ha detallado que la Junta de Extremadura va por delante del resto de comunidades autónomas entendiendo el valor que tiene el desarrollo de las energías renovables, sirviendo de ejemplo para otras regiones
Benjumea ha explicado que con el convenio firmado esta mañana “desde UNEF lo que queremos es que las cosas se hagan bien. Y bien significa más allá incluso de lo que estrictamente nos pide la regulación. Lo que le pedimos a nuestros asociados es una sensibilidad muy especial con el paisaje, con el medio natural, con la fauna, con la flora”.
El presidente de UNEF ha señalado que la solar es la fuente de energía más barata que se puede encontrar en el mercado. Benjumea ha explicado que, tras la deslocalización industrial que se ha vivido en nuestro país, “ahora nos encontramos con una oportunidad para atraer industria que viene de la mano de la energía limpia y barata. Extremadura tiene todos los elementos para ofrecer esa energía: tiene territorio, una regulación favorable, tiene un gobierno que entiende la oportunidad y lo apoya, tiene mano de obra para poder atender a la demanda de empleo, por tanto tiene muchos elementos para que eso sea una realidad”.
